Ya estamos de nuevo a pleno rendimiento en la Hermandad, el nuevo curso rociero ya está aquí y como siempre la Concentración de paellas reúne a los hermanos y las peñas rocieras en ese maravilloso lugar como es la Matilla, este es el segundo años que allí se realiza, para junto a la nueva Hermana Mayor disfrutar de un día de convivencia y empezar la preparación para todo este nuevo año rociero.
Desde primeras horas de la mañana el ambiente fue aumentando, ya que desde bien temprano el Hermano Mayor y su reunión, empezó a trabajar en el terreno para tenerlo todo preparado, este año con una estupenda carpa en previsión a lo anunciado por partes meteorológicos, que después gracias a la Virgen del Rocío, todo quedo en nada, un maravilloso día y sin una gota de agua.
Sobre la 13:00 comenzó la Santa Misa oficiada por el director espiritual José A. Sosa Sosa que dedicó palabras a los asistentes y que fue cantada por el Coro de la Hermandad, todo a los pies del monolito inaugurado el pasado año que conmemora la primera pernocta del Simpecado en ese esplendido lugar.
Como primer acto de convivencia organizado por la hermana mayor para su Hermandad, y como de costumbre, fue visitando a las reuniones una por una para obsequiarles con un detalle de recuerdo de este acontecimiento.
Un maravilloso día con un tiempo que acompañó y que hizo que muchas de las reuniones marcharan bien entrada la noche y aprovechado de esta manera la oportunidad que nos da este nuevo lugar de encuentro ya que en los últimos tiempos de Gato todo era complicado ya que se encuentra dentro del Parque Natural.
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